El hecho de porqué empecé a beber, supongo que es común a casi todas las personas que consumen alcohol. Unas han caído en la adicción y otras no. Aunque cabe decir que muchas beben en grandes cantidades y no se han puesto en manos de profesionales para acabar con el problema, pero ese no es mi caso, ya que desde 2021 he reclamado ayuda profesional.
Empecé a beber con 17 años y recuerdo que el primer trago de cerveza fue muy amargo, como preludio a mi adicción, que convertiría mi vida en un camino amargo, valga la analogía. Después de años de consumir y de terapia, he reflexionado lo que me llevó a beber, primero fue el sentirme aceptado socialmente, ya que todo mi entorno, familiares y amigos bebían. Otro fue relacionar alcohol a fiesta de fin de semana, pubs, discotecas y afters. Así que principalmente mi consumo era ocasional, solo los fines de semana o bebedor social, como se suele decir.
Con el tiempo, ese consumo no fue en aumento, me mantenía bebiendo socialmente, pero pasó un hecho que me marcó, un punto de inflexión y ese fue que se acabó una relación con una pareja que tuve en 2008, después de cinco años de relación (cuatro conviviendo juntos), y en la cuál lo pasé muy mal. Tan mal que tuve mi primer ingreso psiquiátrico, con intento de suicidio incluido.
Después de ese ingreso intenté, o mejor dicho, intentamos volver a estar juntos, pero la relación fue a peor, ya que nos distanciamos, esta vez para siempre. Después de haberlo intentado, yo me sentía algo frustrado, pero no quedaba otra que seguir cada uno con su vida.
De 2009 a 2011 hice una vida más o menos normal, relacionándome con chicas, que conocía a través de redes sociales, las típicas APPS de ligues.
Yo en esa época continuaba bebiendo socialmente, aunque esporádicamente me aislaba socialmente, y empezaba a beber en casa solo, algo que no había hecho nunca y ya no los días de fiesta, si no los días de cada día. Compraba la bebida en el Súper de enfrente y consumía escuchando música en casa.
Ya apenas salía, tenía como una especie de sentimiento de culpa, por lo que había pasado con mi ex pareja. Los primeros años, después de haberlo dejado con ella, parecía, o yo tenía esa convicción, de que lo había superado, pero en mi interior, estaba latente una frustración que me hacía beber, para anestesiar ese dolor que sentía.
Mi adicción continuó con épocas que bebía más, otras menos, una temporada no consumía, otras recaía. Finalmente, después de años estando en esa tesitura, decidí ponerme en manos de profesionales, corría el año 2021.
Anónimo


